Un clásico de la gastronomía criolla limeña. Esta vez visitamos para cenar y comenzamos con el Choclo José Antonio, que es un aperitivo de maíz blanco en una salsa de mantequilla, comino y pimienta. Un platillo delicioso, muy diferente, lo recomiendo.
Seguimos con un Rocoto Relleno de Lomo, aquí preparan el lomo o filete cortado en cuadritos pequeños (no molido) y lo cocinan en un guiso criollo, luego rellenan el rocoto, en este caso usaron el rojo que no es el más picante ya limpio y ligeramente hervido para que no pique mucho y lo terminan al horno gratinado con queso. Muy sabroso.
Después vino un Lomo Saltado, este lo presentaron con un huevo frito montado y acompañado de tacu tacu, papas fritas, plátano maduro frito y mucha cebolla. La carne a punto de cocido perfecto, jugosa bien sazonada. Un manjar típico peruano.
Cerramos con un Suspiro Limeño y una Mazamorra de chicha morada. Acompañamos los platos con un Montes Reserva Cabernet Sauvignon que dio un maridaje excelente. La carta de vinos está bien. El pan es muy bueno. El servicio es muy amable y conocedor del menú.
Están ubicados en la Bernardo Monteagudo 200 Orrantia del Mar – San Isidro, Lima, Perú.
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